Thursday, March 08, 2007

David Gilmour : una leyenda del rock progresivo.


Con el título “ Roger Waters: el genio creativo de Pink Floyd”. están promocionando lo que será la primera visita que haga este magnifico músico a nuestro querido Perú. Me parece un poco exagerado y hasta injusto el título que le dan ya que David Gilmour también fue creador y gestor de esa maravillosa banda llamada Pink Floyd. Para hablar de Pink Floyd habría que sentarse y conseguirse una buena dotación de cigarros, porque hay mucho que decir. Esta banda, para mi una de las mejores de todos los tiempos, empezó su carrera a mediados de los sesentas. Liderados por Barret y Waters empezaron a hacerse conocidos con su música “psicodélica” y con letras solo entendibles por un Barret que empezaba a mostrar algunos indicios de su locura. Waters siente que les falta un guitarrista mas que apoyara Syd Barret que solía desertar en algunas oportunidades durante los conciertos. Fue asi que convocaron a un joven y desconocido guitarrista llamado David Guilmour. Finalmente cuando se dirigían a un concierto Waters ordenó no recoger a Barret quedando como guitarrista principal el joven Guilmour. Empiezan a hacerse conocidos y siguen la misma línea de siempre: el rock psicodélico o progresivo de principio de los 70s. Por esos años aparece una tendencia musical simple, pegajosa y que iba en contra de todo el sistema: el punk. Totalmente opuestos a la ese tipo de música por su sofisticado estilo de interpretación y grado de creatividad, sacan al mercado a mediados de 1973 su obra cumbre : The Dark side of the moon un albun conceptual en el que se mezclan referencias a la neurosis, la locura y la fama y técnicamente fue una innovación al utilizar un nuevo equipo de 16 canales en los estudios de Abbey Road con el ingeniero de sonido Alan Parson a los mandos de la edición, constituyendo un nuevo estandar en la alta fidelidad. Un disco realmente genial, en donde se pone de manifiesto la calidad de Waters y sobretodo la maestría de Gilmour en las guitarras. Por estas épocas Gilmour decide experimentar con el sonido de su guitarra, llegando inclusive a desarmar muchos pedales de efectos y cambiarles en algo el sonido final. Dos años después sale el disco Wish you were here, con gran acogida entre la juventud de la epoca. A estas alturas ya existían algunas diferencias entre Waters y Gilmour, sobretodo en la parte musical. Luego de publicar el disco Animals sacan a la luz una opera rock titulada The Wall. Este disco es finalmente quien da a conocer a Pink Floyd como superbanda a nivel mundial. El duo Waters – Gilmour vuelven a la escena con una obra maestra. Inclusive se hizo una película que llevó el mismo nombre y en donde Roger Waters hizo sus pininos en la producción y dirección de la misma. Lastimosamente la película resultó un fracaso económico. Y esto unido a otros asuntos hacen que la banda cada vez se vaya desintegrando mas, sobretodo por la soberbia y autoritarismo de Waters. Es así que en 1985 entre desacuerdos y peleas sacan el último disco de la era de Pink Floyd con Roger Waters : The final cut. Gilmour y Waters se disputaron el nombre de la banda por muchos años hasta que finalmente llegan a un acuerdo en donde Gilmour seguiría tocando con la banda y Waters se reservaba todos los derechos de The Wall. Pink Floyd siguió tocando hasta 1995 con Gilmour a la cabeza, y luego de esto deciden parar aunque nunca anunciaron su separación definitiva. En el 2005 y tras 20 años de peleas, Waters y Gilmour se unen con los otros dos miembros de la banda y aparecen en escena en el concierto benéfico denominado Live 8. Pink Floyd recibe el reconocimiento como mejor performance y sus discos se volvieron a vender obteniendo grandes ganancias. Gilmour decide donar el excedente de las ganancias, argumentando que no podían aprovechar un fin benéfico para ganar dinero. Si bien es cierto que David Gilmour no es miembro original de la banda (tal vez por dos años ) es sin lugar a dudas uno de los gestores de toda esa genialidad y creatividad musical que significó Pink Floyd en sus mejores años, claro sin dejar de mencionar a Syd Barret ( fallecido en el 2006 ) a quien inclusive se le atribuye la idea de la música o rock psicodélico que marcaría el rumbo de la banda. Creo que ese logo que repiten a cada rato los auspiciadores del evento de Waters lo hacen con fines promocionales porque lo real es que sin Gilmour y Barret, tal vez Pink Floyd nunca hubiese sido lo que fue, sino basta escuchar la guitarra en Run like Hell o el solo final de Confortably Numb, reconocido por muchos críticos como uno de los mejores de todos los tiempos. Quizas Gilmour no es un guitarrista privilegiado ni mucho menos el mejor, pero su calidad, sobriedad y sobretodo su genialidad para la interpretación lo hacen ser un grande entre grandes.

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